Planes de ahorro surgen como opción al desempleo
| Lunes 02 febrero, 2015
Abrir una cuenta de ahorros, más allá de ser un gasto adicional, se podría convertir en la estrategia para enfrentar una posible situación de desempleo a futuro.
Actualmente, los bancos ofrecen diferentes formas de ahorro para los clientes interesados en tener un soporte adicional.
No es necesario hacer una gran inversión. Con solo una rebaja de ¢20 mil mensuales, al finalizar el año tendría un fondo del cual sacar provecho, y si no lo llegara a necesitar, irá acumulando intereses.
Este dinero se podría destinar a gastos superfluos del momento y el beneficio sería mayor si se guarda una parte, según los expertos.
Los datos de ahorro reflejan que en el país, las personas se están inclinando más por depósitos a plazo, que implican no tocar el dinero por un tiempo, tanto en cuentas en dólares como en colones.
No obstante, la elección preferida por la población para ahorrar en la actualidad son los dólares, según indicadores del Banco Central de Costa Rica.
Una de las opciones que tiene disponibles Davivienda es el Plan Futuro, que implica rebajar el monto de la cuenta automáticamente en forma quincenal o mensual.
El plazo de retiro se ubica entre los tres meses y los cinco años, lo que debe ir según el plan de inversión de la persona, que puede ir desde un pago de estudios hasta la prima para una propiedad.
“Los beneficios de ahorrar a través de un Plan Futuro, van más allá de la ganancia en intereses, pues se traduce en una cultura y orgullo por el logro de montos significativos, que son a su vez el inicio de un nuevo proyecto, o bien el respaldo ante una eventualidad”, dijo Dacio Villalobos, gerente de Productos Pasivos de Davivienda.
Este plan permite que el cliente haga un retiro en el momento que lo decida, pero conllevaría el pago de una comisión por la cancelación anticipada.
La moneda en que la persona ahorre depende de si va a necesitar el dinero en dólares o colones, agregó Villalobos.
En el caso de Promerica, el Plan de Ahorro Metas es un capital programado, de acuerdo con la conveniencia del cliente, en plazo, monto y moneda.
“El usuario puede llevar un control de su ahorro por cualquiera de nuestros canales electrónicos. Al final del plazo, tendrá el monto ahorrado más la capitalización mensual”, comentó Federico Chavarría, subgerente de Negocios de Banco Promerica.
El BCR, además de los instrumentos tradicionales, ofrece los certificados de depósitos electrónicos, que pueden ser renovados automáticamente, y sirven como garantía para créditos con el banco.
Los fondos de inversión pueden ser otra elección interesante. El monto inicial para participar va de los ¢20 mil y llega los $50.
“Son perfectos para que la persona pueda invertir su aguinaldo y retirarlo en cualquier momento con una rentabilidad muy competitiva dentro de las opciones de inversión a la vista”, dijo Luis Ernesto Feoli, gerente de Productos y Servicios.
En Lafise están por lanzar en febrero próximo un producto de ahorro programado.
“Si una persona desea ahorrar, debe iniciar ahora mismo”, dijo Viviana Hidalgo, gerente de Sucursales de Banco Lafise.