Profesor a su medida
Dinia Vargas dvargas@larepublica.net | Jueves 02 julio, 2009
Profesor a su medida
Dinia Vargas
dvargas@larepublica.net
Escoger un instructor de golf es una decisión que no se debe tomar a la ligera, sino pensarla muy bien, para elegir al profesional que mejor nos pueda enseñar este deporte.
Por eso los golfistas Mauricio Zamora y Jorge Piedrahita nos dan los siguientes consejos para escoger a un profesor.
1. Compatibilidad: Es responsabilidad del golfista asegurarse de que existe una química con el profesor. Que el tipo de personalidad, metas y perspectivas sean similares y que el instructor tenga la capacidad de relacionarse con las necesidades individuales del jugador.
Investigue preguntando a los socios y algunos alumnos acerca del profesor y de las clases, busque buenas referencias; si las obtiene llame al instructor y pregúntele si tiene tiempo para hablar con usted acerca de su juego y objetivos por mejorar.
Recuerde, un buen instructor estará encantado de hablar con usted acerca de su juego, y conocerle como persona, antes de ayudarle con su juego.
2. Calificado y con experiencia: Debe asegurarse de conocer un poco más sobre el instructor y su currículum profesional, que haya demostrado una indiscutible capacidad para ayudar a los jugadores a mejorar en sus juegos a través de los años.
La experiencia que tiene el instructor tiene mucho peso a la hora de evaluar. Infórmese de la filosofía del instructor, que haya pasado por los diversos ciclos y que sea acreditado por la PGA.
3. Herramientas para ayudar el swing: Muchos instructores tienen bolsas llenas de ayudas para su swing, que van desde lo simple y antiguo hasta lo caro y que parecen de la era espacial.
Sin embargo, puede buscar un instructor que invierte su tiempo, dinero, conocimiento profesional y motivación en el uso de ayudas provisionales. Asegúrese de que el instructor esté utilizando esa ayuda de manera que sienta diferencias en su juego. Cuidado con el instructor que tiene un “cura-todo” esto no siempre ayuda a todos los jugadores.
4. Tecnología: Hoy en día la tecnología se convierte en un aliado imprescindible. En el golf es fundamental el vídeo que permite analizar del swing, se ha convertido en un elemento básico para todos los campos de golf donde la instrucción es profesional.
Si pagará para la instrucción lo mejor es empezar con una revisión de su juego en vídeo, casi como una opción prioritaria. Cuando el vídeo se utiliza correctamente, es un tercer par de ojos (usted y su instructor son el primero y el segundo).
Un buen instructor tiene la capacidad para ver el error en primer lugar, y utilizar sus conocimientos de esa falla para diagnosticar una cura o simulacro para que en la práctica que se realiza se puedan ver las mejoras.
5. Comunicación y positivismo: Un profesor debe tener un programa disponible solo para usted, que le permita hacer preguntas, dar información, recibir el seguimiento de instrucciones, calendario de clases, o hacer otro tipo de preguntas, después de su lección.
Además, debe mostrarse positivo ante su alumno, eso se va a reflejar en la forma en que se comunica con él.
6. Capacidad de juego: No es necesario que su instructor de golf sea un gran jugador. Los grandes jugadores no necesariamente son grandes instructores. Algunos de los profesores más grandes del mundo nunca jugaron a nivel competitivo.
El debe tener la habilidad o poder demostrar con el ejemplo lo que quiere transmitir.
7. Credibilidad: Al final todos estos aspectos van a lograr que el alumno crea y confíe en su profesor, de lo contrario lo único que logrará será perder el dinero y el tiempo invertidos.
Dinia Vargas
dvargas@larepublica.net
Escoger un instructor de golf es una decisión que no se debe tomar a la ligera, sino pensarla muy bien, para elegir al profesional que mejor nos pueda enseñar este deporte.
Por eso los golfistas Mauricio Zamora y Jorge Piedrahita nos dan los siguientes consejos para escoger a un profesor.
1. Compatibilidad: Es responsabilidad del golfista asegurarse de que existe una química con el profesor. Que el tipo de personalidad, metas y perspectivas sean similares y que el instructor tenga la capacidad de relacionarse con las necesidades individuales del jugador.
Investigue preguntando a los socios y algunos alumnos acerca del profesor y de las clases, busque buenas referencias; si las obtiene llame al instructor y pregúntele si tiene tiempo para hablar con usted acerca de su juego y objetivos por mejorar.
Recuerde, un buen instructor estará encantado de hablar con usted acerca de su juego, y conocerle como persona, antes de ayudarle con su juego.
2. Calificado y con experiencia: Debe asegurarse de conocer un poco más sobre el instructor y su currículum profesional, que haya demostrado una indiscutible capacidad para ayudar a los jugadores a mejorar en sus juegos a través de los años.
La experiencia que tiene el instructor tiene mucho peso a la hora de evaluar. Infórmese de la filosofía del instructor, que haya pasado por los diversos ciclos y que sea acreditado por la PGA.
3. Herramientas para ayudar el swing: Muchos instructores tienen bolsas llenas de ayudas para su swing, que van desde lo simple y antiguo hasta lo caro y que parecen de la era espacial.
Sin embargo, puede buscar un instructor que invierte su tiempo, dinero, conocimiento profesional y motivación en el uso de ayudas provisionales. Asegúrese de que el instructor esté utilizando esa ayuda de manera que sienta diferencias en su juego. Cuidado con el instructor que tiene un “cura-todo” esto no siempre ayuda a todos los jugadores.
4. Tecnología: Hoy en día la tecnología se convierte en un aliado imprescindible. En el golf es fundamental el vídeo que permite analizar del swing, se ha convertido en un elemento básico para todos los campos de golf donde la instrucción es profesional.
Si pagará para la instrucción lo mejor es empezar con una revisión de su juego en vídeo, casi como una opción prioritaria. Cuando el vídeo se utiliza correctamente, es un tercer par de ojos (usted y su instructor son el primero y el segundo).
Un buen instructor tiene la capacidad para ver el error en primer lugar, y utilizar sus conocimientos de esa falla para diagnosticar una cura o simulacro para que en la práctica que se realiza se puedan ver las mejoras.
5. Comunicación y positivismo: Un profesor debe tener un programa disponible solo para usted, que le permita hacer preguntas, dar información, recibir el seguimiento de instrucciones, calendario de clases, o hacer otro tipo de preguntas, después de su lección.
Además, debe mostrarse positivo ante su alumno, eso se va a reflejar en la forma en que se comunica con él.
6. Capacidad de juego: No es necesario que su instructor de golf sea un gran jugador. Los grandes jugadores no necesariamente son grandes instructores. Algunos de los profesores más grandes del mundo nunca jugaron a nivel competitivo.
El debe tener la habilidad o poder demostrar con el ejemplo lo que quiere transmitir.
7. Credibilidad: Al final todos estos aspectos van a lograr que el alumno crea y confíe en su profesor, de lo contrario lo único que logrará será perder el dinero y el tiempo invertidos.