¿Qué significa para Costa Rica ocupar una silla en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU?
Arnoldo André despacho-canciller@rree.go.cr | Lunes 27 febrero, 2023
Dr. Arnoldo André
Ministro de Relaciones Exteriores
Consciente de los desafíos globales que representan la desigualdad, la pobreza, los discursos de odio, el ataque a los espacios democráticos y la crisis ambiental, Costa Rica se incorpora esta semana al Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el objetivo de apoyar el avance de los más altos estándares de protección y promoción de derechos durante los próximos tres años.
Este puesto se traduce en una responsabilidad para nuestro país. Todo compromiso internacional implica también mirar hacia adentro y emprender acciones consecuentes para prevenir y combatir la violencia, la discriminación y todo discurso de odio en la población costarricense. En esta coyuntura, la Comisión interinstitucional para el seguimiento e implementación de las obligaciones internacionales de Derechos Humanos, que coordina y preside la Cancillería, está llamada a redoblar esfuerzos para hacer más efectivo su trabajo.
Compromisos asumidos. Una de las prioridades que Costa Rica ha establecido como miembro del Consejo es duplicar esfuerzos para eliminar toda forma de violencia y discriminación contra mujeres y niñas. Su empoderamiento económico, la reducción de la brecha salarial, el respeto por su salud, derechos sexuales y reproductivos, su plena autonomía física, la eliminación de estereotipos y roles de género y acceso a la educación, representan solo algunos de los desafíos vigentes.
Otro gran eje de trabajo es continuar con la promoción de la implementación del derecho humano al ambiente sano, limpio y sostenible, cuyo reconocimiento universal fue liderado por Costa Rica desde el año 2021, en Ginebra; y en el año 2022, en Nueva York. Se redoblarán acciones para que la arquitectura internacional responda efectiva y oportunamente al impacto negativo en el disfrute de los derechos humanos de las situaciones derivadas de la crisis climática, la pérdida de biodiversidad, la contaminación, degradación ambiental y el deterioro del océano.
Atención efectiva para los más vulnerables. Costa Rica siempre se ha caracterizado por defender los principios de los derechos humanos, promoviendo el diálogo abierto y transparente para buscar soluciones a las múltiples crisis en cada rincón del mundo, bajo la consigna de que ningún país debe estar por encima del escrutinio del Consejo y ninguna persona debe estar desamparada de la atención de este órgano de Naciones Unidas.
En consecuencia, se apoyarán iniciativas tendientes a combatir la discriminación múltiple o interseccional, dando particular atención a la situación que enfrentan las personas afrodescendientes, las personas con discapacidad, los pueblos indígenas, las personas LGTBI+ y los migrantes, refugiados y desplazados internos. En este contexto, los defensores de derechos humanos también seguirán siendo respaldados por la diplomacia costarricense.
El Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto está comprometido con los derechos humanos, con el derecho internacional, con los principios y valores democráticos y con el cumplimiento de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Estos principios son piedras angulares que nos permiten habitar en paz, sin ejército y con uno de los más altos niveles de vida de la región.
En estos tres años, Costa Rica dejará su estampa en el Consejo de Derechos Humanos para asegurar que continúe siendo un pilar inquebrantable y fundamental de las Naciones Unidas; el espacio por antonomasia para que los Estados, con la imprescindible participación significativa de las organizaciones de sociedad civil, puedan dialogar libremente y sin presiones hacia la construcción de una comunidad internacional más próspera, solidaria y respetuosa de los derechos humanos.
Este 2023 marca el 75 aniversario de la adopción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos que, basada en valores comunes y universales, sirve de base para el sistema universal de derechos humanos sobre la idea fundamental e inalienable de la igualdad en dignidad de todas las personas.
Además, celebramos el 30 aniversario de la adopción de la Declaración y el Programa de Acción de Viena, que creó la figura del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y de su Oficina, lo cual es uno de los grandes aportes que nuestro país ha dado a la ONU debido al papel que jugó en su creación.
En el contexto actual de creciente polarización, debemos aprovechar ambos aniversarios para promover los valores que han caracterizado nuestra política exterior, promover el entendimiento y el diálogo político, manteniendo como centro de nuestro quehacer a las personas, la no discriminación y los principios de los derechos humanos.