Real Estelí le dio una lección al Alajuelense
Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Lunes 02 diciembre, 2024
Al que no quiere caldo, dos tazas, refrán que el cuerpo técnico del Alajuelense y sus jugadores, deberían tener pegado en las paredes del vestuario en el CAR.
El Real Estelí no le metió tres goles a la Liga en la primera media hora del partido de ida de la final de la Copa Centroamericana, únicamente por falta de puntería.
Pero Saprissa si le metió esos tres goles en el único juego que los manudos perdieron antes de ganar la fase de clasificación.
La campaña del Alajuelense ha sido espectacular, juega 21 partidos, no sumamos contra la ADG, pierde solo uno y presenta la retaguardia menos vencida del torneo.
Lo que sucede y esto en Alajuela se lo saben de memoria, en las semifinales se empieza de cero, todo lo bueno y positivo de la etapa clasificatoria se archiva y es suficiente jugar un mal partido, solo uno, y se escapa la corona del campeonato.
Le pasó a la Liga de Andrés Carevic, la temporada en que Saprissa ganó su título 36, venciendo en la final a Herediano.
El León con 50 puntos y sin derrotas en fase regular perdió un solo juego ante Saprissa y por formato ahí se acabó todo para ellos.
Entonces, lo sucedido en el Estadio Independencia, debe ser lección vital para el cuerpo técnico erizo. Si el equipo no entra concentrado desde el minuto uno y permite las libertades ofensivas del rival, sumado a las propias limitaciones defensivas, al Alajuelense se le puede volver a escapar la corona, de la que hoy es el equipo favorito para conquistarla.
Repasemos que el 1-0 en favor del Real Estelí, tuvo alguna similitud con el 1-0 que le hizo el Saprissa cuando le quitó el invicto.
Fuga de Byron Bonilla por el costado izquierdo del ataque, centro al área y toca Delis Vargas a la red. Centro de Mariano Torres por el costado izquierdo del ataque, centro al área y toca Javon East a la red.
La diferencia fue que luego el Monstruo metió dos más, en cambio, por falta de brújula, el Tren del Norte no aumentó las cifras y el juego se le acomodó a los manudos con la sanción del penal y el empate.
Entonces, más que estar satisfecho por el empate logrado como visitante, buen negocio sin duda, Alexandre Guimarães tiene que estar muy, pero muy preocupado, por ese inicio tan desafortunado de sus pupilos, superados por un rival que no tuvo capacidad para liquidarlos, un favor que puede que no encuentren en semifinales o la final de nuestro Apertura por el título.
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