Restaurantes certificarían calidad ante turistas

La labor de los restaurantes se certificarían con el fin de demostrar su alta calidad y valor agregado cultural tanto a los clientes nacionales e internacionales.

El Instituto Costarricense de Turismo, anunció en el marco del simposio "El Restaurante y el Mercado Turístico Nacional e Internacional", que el Certificado de Sostenibilidad Turística para este tipo de comercios está ya en su fase final de diseño.

"Esta nueva norma permitirá diferenciar la excelencia sostenible con la que operan los restaurantes del país", afirmó en un comunicado Allan Flores, ministro de Turismo.

Además, según Flores, el contar con un Certificado "repercutirá positivamente en la experiencia que vivirán los turistas quienes probarán platillos y bebidas de alta calidad y bajo los principios esenciales de la sostenibilidad".

Para Alberto López, líder del Proceso de Sostenibilidad del ICT, el principal beneficio es "la capacidad de ofrecer al visitante una oportunidad de disfrutar servicios turísticos gastronómicos certificados".

Con un CST, los restaurantes demuestran "que son empresas responsables con el patrimonio, tanto cultural como natural y que se preocupan por las comunidades cercanas a su operación y sus principios gastronómicos, además de promover la creación de una identidad gastronómica costarricense", añadió.

La Cámara Costarricense de Restaurantes (CACORE), presentó hoy un estudio que reveló que el principal reto del sector es "entender al cliente, ofrecerles propuestas sencillas y al mismo tiempo cargadas de valor, autenticidad y contemporaneidad".

El presidente de CACIRE, Manuel Burgos, afirmó que el diagnóstico de la industria expuso que otros grandes retos del sector pasan por la revisión de aspectos como exceso de oferta, altos costos operativos, alta rotación de personal, así como necesidad de crear estrategias para mejorar en la operación y la atracción de clientes más fieles.

Según el director ejecutivo de la Cámara, Alejandro Madrigal, el objetivo es desarrollar un concepto de "valor cultural de la gastronomía" que contribuya al turismo siendo un "atractivo adicional para el país" en el que se destaque la "biodiversidad alimentaria e interculturalidad".