Santos despachó a Saprissa
Giuliana Llanes gllanes@larepublica.net | Lunes 17 septiembre, 2012
Santos despachó a Saprissa
Morados revivieron pesadilla de temporada anterior
Un equipo ordenado, veloz, con manejo del mediocampo y un implacable atacante en gran forma como Cristian Lagos, esa fue la receta que aplicó el Santos de Guápiles al Saprissa, para arrancar de nuevo los tres puntos —igual que en la semifinal del torneo anterior— a un irregular conjunto morado que nunca encontró la vía para poner en entredicho la victoria visitante.
El 2-0 rojiblanco, además de llevar justicia a la pizarra, evidencia una clara victoria de César Eduardo Méndez, sobre su colega y
compatriota Daniel Casas. La poblada zona de volantes guapileña siempre encontró respuesta en el pase y referencia en ataque, con recurrentes entradas por las bandas que fueron dinamita pura para la defensa tibaseña.
Por su lado, Casas vio su derrota en esa zona del campo. Jamás logró hallar un eslabón entre su media y un voluntarioso Daniel Colindres y el casi “turista” que significa el brasileño Ricardo Costa para la ofensiva morada.
Cómo le hicieron daño al monstruo por las bandas, cuando no fue Crisanto Esquivel, fue Mario Víquez o Diego Madrigal o bien Osvaldo Rodríguez, tanto así que por esa vía cayó el primer tanto de Lagos a la media hora de juego. Un muy buen balón enviado al centro por Madrigal, solo necesitó colocar el pie de Lagos para mandarla al fondo solo, sin marca alguna.
Lo mejor de la S se vio al final de la primera parte, cuando Randall Porras sacó de la línea, una pelota con cara de gol tras un remate de Gabriel Badilla al 43'.
Apenas cuando Saprissa buscaba ir al frente por el empate, cayó la segunda conquista de Lagos. Un despeje al centro de Douglas Sequeira, cayó en los botines de Rodríguez, quien sacó un potente remate que apenas rechazó Víctor Bolívar justo donde se encontraba el nueve rival, para marcar el 2-0 final a los cuatro minutos del complemento.
Sergio Alvarado
salvarado@larepublica.net
Morados revivieron pesadilla de temporada anterior
Un equipo ordenado, veloz, con manejo del mediocampo y un implacable atacante en gran forma como Cristian Lagos, esa fue la receta que aplicó el Santos de Guápiles al Saprissa, para arrancar de nuevo los tres puntos —igual que en la semifinal del torneo anterior— a un irregular conjunto morado que nunca encontró la vía para poner en entredicho la victoria visitante.
El 2-0 rojiblanco, además de llevar justicia a la pizarra, evidencia una clara victoria de César Eduardo Méndez, sobre su colega y
compatriota Daniel Casas. La poblada zona de volantes guapileña siempre encontró respuesta en el pase y referencia en ataque, con recurrentes entradas por las bandas que fueron dinamita pura para la defensa tibaseña. Por su lado, Casas vio su derrota en esa zona del campo. Jamás logró hallar un eslabón entre su media y un voluntarioso Daniel Colindres y el casi “turista” que significa el brasileño Ricardo Costa para la ofensiva morada.
Cómo le hicieron daño al monstruo por las bandas, cuando no fue Crisanto Esquivel, fue Mario Víquez o Diego Madrigal o bien Osvaldo Rodríguez, tanto así que por esa vía cayó el primer tanto de Lagos a la media hora de juego. Un muy buen balón enviado al centro por Madrigal, solo necesitó colocar el pie de Lagos para mandarla al fondo solo, sin marca alguna.
Lo mejor de la S se vio al final de la primera parte, cuando Randall Porras sacó de la línea, una pelota con cara de gol tras un remate de Gabriel Badilla al 43'.
Apenas cuando Saprissa buscaba ir al frente por el empate, cayó la segunda conquista de Lagos. Un despeje al centro de Douglas Sequeira, cayó en los botines de Rodríguez, quien sacó un potente remate que apenas rechazó Víctor Bolívar justo donde se encontraba el nueve rival, para marcar el 2-0 final a los cuatro minutos del complemento.
Sergio Alvarado
salvarado@larepublica.net