Sea un líder que comunica
Daniela Granados dgranados@larepublica.net | Miércoles 19 marzo, 2014
Liderazgo
Sea un líder que comunica
Habilidades oratorias marcan diferencia con el resto
Desarrollar la comunicación de manera adecuada en el mundo de los negocios es fundamental para concretarlos y obtener credibilidad. Esto es válido en todos los aspectos de la vida, pero sobre todo en el liderazgo empresarial.
La comunicación es una de las habilidades más importantes para cerrar buenos negocios. La “pequeña conversación” se debe dar con el fin de conocer de manera un poco más personal a quienes negocian con usted, ya que esto podría llegar a afectar a su empresa.
El liderazgo y la comunicación se desarrollan de manera simultánea, los mejores líderes deben ser los mejores comunicadores e incrementar habilidades que permitan que el equipo desee seguirlos, porque saben que siempre buscan lo mejor para ellos y para la compañía.
El lenguaje corporal también desempeña un rol fundamental en el desarrollo de nuevos negocios. La manera en que las partes se comunican con gestos, miradas y hasta la forma de hablar, puede determinar el cierre o la pérdida de nuevas inversiones, indicó Marjorie North, experta en comunicación de la Universidad de Harvard.
Un líder debe transmitir a su personal experiencia, integridad que va de la mano con la honestidad, además de respeto y comunicación; el sentido del humor es una característica muy apreciada en los líderes por sus equipos.
La buena comunicación es la base de un liderazgo sólido, además de que, quien es un verdadero líder, siempre querrá que quienes vienen detrás se conviertan en líderes también, señaló Michael Shinagel, experto en liderazgo y toma de decisiones estratégicas de la Universidad de Harvard.
Es imprescindible recordar que nadie nace líder, y que cualquier persona puede desarrollar las habilidades para convertirse en uno y en un buen orador. Quienes lo logran tienen el carisma para hacer que el trabajo dentro de la empresa sea más sencillo.
Existen dos tipos distintos de líderes: quienes llevan la batuta desde el frente del grupo, enseñando a los demás el camino, y quienes lo hacen desde atrás, “empujando” al equipo hacia el camino correcto, agregó Shinagel.
Una buena cabeza de equipo involucra a todo su personal en la toma de decisiones y lo hace pensando en el bien de un todo y no de una persona en específico.
Daniela Granados
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