Solís se quedó sin el “pararrayos” de su Gobierno
Esteban Arrieta earrieta@larepublica.net | Jueves 23 abril, 2015
Relaciones con Asamblea reinician con salida de Jiménez
Solís se quedó sin el “pararrayos” de su Gobierno
Si cambio en Ministerio de Presidencia no funciona, mandatario sufriría desgaste político
La salida de Melvin Jiménez como ministro de la Presidencia, dejó a Luis Guillermo Solís sin el “pararrayos” que recibió la tormenta política en el primer año de gestión.
No obstante, con su despedida del Gobierno, se abre un nuevo capítulo en las relaciones entre Cuesta de Moras y Zapote, que podría ser aprovechado por el mandatario para impulsar su agenda.
En ese sentido, si el nuevo Ministro de la Presidencia hace bien su trabajo, la administración Solís Rivera no necesitaría un nuevo pararrayos, considera la oposición.
Por el contrario, si Sergio Alfaro no cumple las expectativas, el Presidente empezaría a ser responsabilizado por los desaciertos del Gobierno y con ello, la percepción de la ciudadanía sobre su gestión desmejoraría en este segundo año de trabajo, agregan los legisladores.
En los pasados 12 meses, los problemas de comunicación interna y la falta de diálogo con los sectores políticos y productivos, fueron achacados a Jiménez, asimismo, se le cuestionó por un deficiente análisis del entorno político, que llevó al Gobierno errores graves.
Entre ellos, el impulso de un proyecto de ley que violentaba la libertad de prensa y el anuncio desmentido de la pérdida de 700 empleos por parte de Citigroup.
“Melvin acaparó las críticas en este primer año y con su salida el Presidente se quedó sin pararrayos. El mandatario ya tiene 12 meses de experiencia en el cargo, y por tanto, se espera un mejor desempeño en este segundo año, asimismo, esperamos una buena gestión de Alfaro, de lo contrario, habría un desgaste de la imagen gubernamental”, expresó Patricia Mora, diputada del Frente Amplio.
Por el momento, el escenario negativo que plantea la legisladora, parece todavía lejos para Solís.
Las expectativas que ha generado Alfaro como nuevo enlace entre la Presidencia y Cuesta de Moras son muy altas.
Por ejemplo, Liberación Nacional y sus 18 legisladores han reabierto los canales de comunicación con Zapote, los cuales estaban cerrados por la presencia de Jiménez en el Gobierno.
Mientras tanto, el PUSC, el Frente Amplio, el Movimiento Libertario, destacaron el cambio como positivo y se espera que ahora sí haya un diálogo fluido para apoyar proyectos de ley.
Por su parte, el nuevo ministro confía en sus capacidades y en la experiencia que tuvo como legislador entre 2006 y 2010, para ser un enlace efectivo.
“En lo personal sé que este es un cargo que genera mucho desgaste rápido, pero estoy dispuesto a asumir el reto. Don Melvin y yo somos dos personas distintas, con distintas experiencias y capacidades. Sin embargo, considero que la experiencia legislativa como diputado me ayudará en mi gestión como ministro”, asevera Alfaro.
Esteban Arrieta
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