Logo La República

Viernes, 22 de noviembre de 2024



MAGAZINE


“Soy un enamorado de Costa Rica”

Carolina Barrantes redaccion@larepublica.net | Jueves 13 agosto, 2015


Armando Manzanero cantará algunas canciones a dúo con su hijo Juan Pablo en el concierto que ofrecerá en suelo tico. Cortesía Interamericana de Producciones/La República


807 canciones ha escrito Manzanero

“Soy un enamorado de Costa Rica”

Armando Manzanero conversó con Magazine sobre su carrera y el concierto que dará en el país

Agradecido hasta lo más profundo de su alma por cada minuto de vida que tiene, por la oportunidad de compartir su música, y hasta ver unos pajaritos en un jardín, así es Armando Manzanero.
El gran compositor mexicano se presentará en el país el próximo 20 de agosto y conversó con Magazine sobre la velada, en la que estará acompañado por su hijo Juan Pablo Manzanero.
También conversó sobre su carrera y la fuerte relación que lo une con los costarricenses.

Vuelve para dar una serenata a las madres
Va a ser maravilloso, es un motivo más que especial, por lo que no puedo prescindir de lo más tradicional de mi repertorio, pero también llevo propuestas de cosas nuevas y lo más importante es que voy a trabajar al lado de mi hijo Juan Pablo, que es un magnífico compositor, y vamos a cantar a dueto.
Yo les dedicaré todas las canciones a las madres ticas, porque la canción mía es de amor. Uno le puede decir a la mamá “Somos novios” porque uno puede quererla como una novia, es un amor tierno, bonito; también ocurre con “Adoro”, porque uno puede adorar el camino por el que uno va de su mano.
Mis canciones tienen la gran ventaja de que nunca hablan de rencores y mucho menos hablan mal de alguna dama.
La única cosa que yo puedo garantizar es que todos los asistentes la van a pasar muy bien.

Usted ya tiene una amistad muy fuerte con los ticos...
Creo que los ticos son un público con el que siempre he platicado, he congeniado, además, soy un enamorado de Costa Rica, de todo lo que tiene que ver con su país. Al pasarlo tan bonito con ustedes, he llegado a tener mucha gente cautiva que ha escuchado durante mucho tiempo mi música y que lo ha pasado de generación en generación.
En el año 60, o sea hace 55 años tuve la oportunidad de estar por primera vez en Costa Rica con Angélica María, y tengo recuerdos maravillosos.
En ese entonces fui a trabajar a un cine, el Raventós, y ahora es un teatro; imagínese cómo es de mágica mi vida que tiene tiempos tan diferentes.
Dios bendiga a Costa Rica y su gente, porque así como ustedes tienen ganas de verme y escucharme, así yo tengo ganas de encontrarme con ustedes.

Usted ha dicho que no vive de añoranzas ni amarguras, que su vida se basa en pura felicidad, ¿qué lo hace feliz?
Definitivamente, a mí me hace feliz todo. Por ejemplo, el día de hoy (ayer para el lector) estoy sentado en un jardín que es realmente una belleza, estoy viendo cómo dos pájaros bajan al césped a buscar qué comer, eso me hace muy feliz. Ver las flores sembradas al pie de unos encinos también me hace muy feliz.
Soy una persona que afortunadamente todavía tiene el poder del asombro, la emoción de valorar las cosas bonitas.
Valoro los detalles desde que soy niño; soy un maya y pertenecer a esa raza me hizo nacer con una sensibilidad quizás mucho más fácil.

Si usted no hubiera sido cantante, ¿a qué se habría dedicado?
Hubiera sido el dueño de un circo, porque lo amo, no en vano mi primer trabajo fue en un circo como músico a los diez años.
Amo el circo entrañablemente, acudo a él cuando tengo oportunidad, los dueños de los grandes circos del mundo son mis amigos. Amo el vivir hoy aquí, mañana aquí, pasado aquí, recorrer el mundo a lo mejor en una carreta

Ha escrito más de 800 canciones y ha grabado decenas de discos. ¿Qué más le falta por hacer?
Llevo 807 canciones, pero que eso no asuste, porque comencé desde los 15 años y actualmente tengo 81 años, y no he dejado de escribir porque esa es mi vida, de lo que vivo.
Me inspira todo; llegar a ver el volcán Poás de ustedes tomado de la mano de mi mujer, me inspira que la vida tiene cosas grandiosas. También me encanta el volcán Irazú.
La verdad no me falta nada por hacer. Curiosamente soy un ser que trabaja mucho, sigo componiendo, cantando, y voy a seguir para rato.

¿Cuál es el aspecto por el que le gusta que más lo recuerde su público?
Sería una falta de respeto y una exageración que yo quisiera tener más o algo diferente a lo que Dios me ha dado a manos llenas. Así que es tanto lo que me ha dado y tanto lo que espero hacer, que espero que el público valore todo.
Dios no me dio oro, tesoros, brillantes ni riquezas, pero en cambio me dio algo que no tiene precio: una familia maravillosa, nietos, hijos y esta vida que amo tanto.

Carolina Barrantes
cbarrantes@larepublica.net
@cbarrantesLR

 


 







© 2024 Republica Media Group todos los derechos reservados.