(VIDEO) Tica renunció a su trabajo, vivió en un gimnasio y ahora ganó oro en cuna del Jiu-Jitsu
Walter Herrera wherrera@larepublica.net | Lunes 18 septiembre, 2023 09:01 a. m.
En un impresionante logro deportivo, Andrea Salas, una talentosa atleta costarricense, se alzó con la medalla de oro en el Sudamericano de Jiu-Jitsu en Brasil, la cuna de este apasionante deporte de combate. Su historia es una inspiración para todos, demostrando que la dedicación y el sacrificio pueden llevar a alcanzar metas extraordinarias.
El Sudamericano de Jiu-Jitsu es un torneo de renombre internacional, organizado por la federación más grande de este deporte en el mundo.
Para Andrea Salas, esta fue su primera participación en este prestigioso evento, pero no su primera incursión en Brasil. Anteriormente, compitió en el Open de Sao Paulo y el Open de Río de Janeiro.
En su última hazaña en Brasil, compitiendo en la categoría de 64 kilos, Salas tuvo que enfrentar a cuatro oponentes en su camino hacia la gloria, y al final logró la codiciada medalla de oro. Pero su viaje en Brasil no termina aquí; ahora se prepara para el próximo desafío sin kimono que se llevará a cabo el 15 de octubre en Río de Janeiro.
Brasil es ampliamente conocido como la cuna del Jiu-Jitsu, y Salas reconoce la calidad y la dedicación de sus oponentes. "Mis oponentes son todas increíbles", afirma. "Las peleadoras de aquí son muy fuertes y explosivas, todas practican desde que son muy jóvenes y son experimentadas en la categoría azul. No hay momentos muertos en la pelea, siempre van hacia adelante".
La pasión de Brasil por el Jiu-Jitsu es innegable. Como Salas lo describe, "el Jiu-Jitsu para ellos es como el gallo pinto aquí". Esta pasión y dedicación son lo que la motivaron a dar un paso audaz en su vida y seguir su sueño. Hace tan solo dos años, Andrea Salas comenzó su viaje en el Jiu-Jitsu, y para perseguir su pasión, renunció a su trabajo y vivió en un gimnasio para desarrollar sus habilidades y dedicarse de manera profesional al deporte.
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En Costa Rica, puede que no haya tantos atletas que se dediquen exclusivamente al Jiu-Jitsu, pero Salas no está sola en su dedicación. "Aquí hay 15 personas que tienen la misma historia que yo y que dedican 8 horas al día pensando y entrenando Jiu-Jitsu", dice con orgullo.
Su última pelea en la final fue contra la tercera del mundo en su categoría, un desafío que enfrentó con determinación y éxito. Además, logró un hito significativo al ganar su medalla de oro en el mismo fin de semana en que Costa Rica conmemoraba su independencia.
Ahora, Andrea Salas se prepara para su próximo gran desafío: el Mundial de Jiu-Jitsu sin kimono que se celebrará en diciembre. Con determinación y pasión, continuará entrenando en Costa Rica, llevando el nombre de su país en alto en el escenario internacional. "Lo más importante cuando peleo es mostrar la excelencia de los entrenamientos en Costa Rica", enfatiza. "No es el deporte que más representa al país, pero estamos dejando en alto el nombre del país".
Andrea Salas es un verdadero ejemplo de perseverancia, dedicación y la búsqueda incansable de la excelencia en el deporte, y su historia es un recordatorio inspirador de que los sueños pueden hacerse realidad con trabajo duro y determinación.
