Una de las vías más rápidas para reactivar la economía: La industria de reuniones
Álvaro Rojas alvaro.rojas@costaricacc.com | Miércoles 09 septiembre, 2020
El pasado 26 de agosto, el Gobierno de la República anunció que, para el 9 de septiembre, nuestro país iniciará la apertura gradual de hasta 75 personas por evento del sector llamado “Industria de reuniones”, la cual se ha reactivado de manera eficiente y responsable en países como México, República Dominicana, España, China, Emiratos Árabes, entre otros.
Este sector ha sido mal interpretado durante todos estos meses de crisis, confundiéndose con el sector de eventos masivos; ambos importantes para a la economía, pero con alcances muy diferentes.
La industria de reuniones son todos aquellos eventos, principalmente no masivos, como reuniones corporativas, congresos, convenciones y ferias cuyo aporte no es solo la derrama económica que genera, alcanzando principalmente a Pymes, sino que atrae un tipo de turista, en el caso de las reuniones internacionales que paga hasta tres veces más que el turista de placer, por lo cual es una industria muy lucrativa en gran parte de los países del orbe.
Pero más allá de la derrama económica y del turismo, su valor principal está en el papel que desempaña en la sociedad, y es que nuestro país se ha caracterizado por construir, entre otras cosas, sobre la base de la economía del conocimiento, con la educación como un derecho —ya sea pública o privada, pero de muy buena calidad— y con altos índices de escolaridad en su sociedad; lo que somos hoy tiene muchas de sus raíces fundamentadas en ello. Pero, ¿qué tiene que ver todo esto con la industria de reuniones?
Sencillamente, podríamos minimizar esta industria pensando que es la que hace congresos, ferias, convenciones, reuniones de empresas o se traen expositores a los diferentes recintos del país. No obstante, lo invito a alzar su mirada hacia el horizonte, allá donde grandes países han impulsado sus economías y sus sociedades por medio de una industria de eventos profesionales y empresariales que no son hechos al azar ni por gastar presupuestos, sino que forman parte de una estrategia transformadora para los gobiernos y el sector privado. Países que intentan desarrollar sus conocimientos y economías creativas por este medio.
Gobiernos, empresas y ciudadanos de otras latitudes entendieron que, cada vez que profesionales y no profesionales se reúnen en cualquier lugar para aprender, innovar, intercambiar conocimientos, comentar ideas, hablar del futuro, entre otros, dichas reuniones se convierten en un epicentro para mejorar diferentes áreas —por ejemplo, la atención médica, en el caso de los doctores, para mejorar los estándares, atraer un nuevo talento o hacer crecer el capital intelectual—; en resumen, se trata de una estrategia que afecta todo tipo de desarrollos sociales y económicos en esos países.
Las asociaciones profesionales, como el colegio de médicos, la asociación de nacional de veterinarios, la asociación de nutricionistas y todo el centenar de asociaciones que tenemos en nuestro país son, en su mayoría, las que organizan y atraen este tipo de eventos; sumadas a estas, las empresas para eventos corporativos, ferias, entre otros. Es por esto que debemos comprender que ellos ofrecen la mayor parte del aprendizaje permanente para todas las profesiones del mundo por medio de sus eventos, y Costa Rica no es la excepción.
Entonces, cuando un gobierno piensa en términos de construir una economía basada en el conocimiento, obviamente todos considerarían los colegios y universidades como una base, pero lo que es realmente importante entender es que, una vez que las personas terminan sus estudios universitarios, se necesita un aprendizaje complementario y constante para seguir actualizados y desarrollándose. La cuestión es que dicho aprendizaje no viene necesariamente desde las universidades, sino de sus colegas, asociaciones de su sector o capacitaciones de sus empresas, por lo que las asociaciones y empresas corporativas que hacen eventos son, en ese sentido, el complemento esencial en una economía del conocimiento. Por lo tanto, este sector se convierte en un elemento fundamental para lograr una pronta recuperación, así como una herramienta activa de transición y renovación entre la crisis y la reactivación económica que los gobiernos pueden utilizar de inmediato para responder a la situación actual.
En esta línea de ideas, el Joint Meetings Industry Council (JMIC), organización que representa los intereses de las principales asociaciones de la industria de reuniones a nivel mundial y que ha proporcionado, por más de 50 años, un foro para el intercambio de información, el desarrollo de estrategias y el reconocimiento de la excelencia entre los grupos de esta industria, emitió un manifiesto en julio de este año con el objetivo de estimular a los gobierno para que, en conjunto con la empresa privada, utilicen (como lo están haciendo países desarrollados) a esta industria como un vehículo altamente eficiente y rentable para impulsar la recuperación y la renovación económica, debido a que proporciona una plataforma esencial para la parte financiera, académica, profesional y de interacciones comerciales trasversales a cualquier sector del país, utilizando los elementos de esta industria a su favor, como una gama de organizadores, proveedores de servicios y recintos interconectados que de manera eficiente pueden participar en el desarrollo y la entrega de reuniones, conferencias, exposiciones y actividades relacionadas, colectivamente denominados eventos de negocios que se ejecutan de manera responsable y acatando todos los protocolos de salud.
Dentro de este manifiesto, el JMIC sintetizó varias razones por las que la industria de reuniones se convierte, durante la crisis, en una herramienta estratégica para la recuperación y reactivación económica. Costa Rica cumple con todas, ya que por medio del liderazgo del Instituto Costarricense de Turismo en conjunto con la empresa privada, se ha venido trabajando activamente en este sector en los últimos años, lo que hace que las bondades de esta industria puedan ser también aprovechadas de forma inmediata para el beneficio de nuestro país. Para efectos de este artículo, les compartimos las que consideramos más relevantes para nuestro entorno:
1. Innovación y reinvención:
Las reuniones o eventos de negocios propician el ecosistema idóneo para impulsar el comercio, la innovación, la creatividad, la transferencia de conocimientos, todos requisitos críticos para la recuperación. Parte del propósito de estos eventos es acelerar el progreso en todos los sectores al juntar profesionales que se apoyan a través de comunicaciones, intercambio de información y participación colectiva.
Esta innovación y reinvención es, naturalmente, un motor del avance económico y profesional, pero que será particularmente crítico para adaptarse a las demandas y expectativas de las “nuevas” economías post pandémicas.
2. Impacto Multi-sectorial:
El alcance multi-sectorial de esta industria radica en que es trasversal a cualquier sector del país. Se hacen eventos de tecnología, educación, ciencia, medicina, agricultura, sostenibilidad, turismo, gastronomía, entre otros, por lo que los eventos de negocios son un medio eficaz para apoyar la recuperación y el avance de una amplia gama de sectores económicos, profesionales, académicos y empresariales.
Como resultado de estas reuniones, se establecen nuevos estándares, nuevas políticas, avances de investigaciones o intercambio de buenas prácticas, permitiendo impulsar la activación, la renovación y la incorporación de los diferentes sectores que deberán estimularse con el fin de lograr una pronta recuperación, en lugar de, simplemente, abordar una gama limitada de estos sectores de forma individual, limitándose en lo que pueden lograr por sí mismos.
3. Relaciones y confianza:
Las reuniones de negocios restablecen las relaciones y generan confianza, ya que utilizan eficientemente el poder colectivo de dinámica de grupo y el pensamiento para lograr un alto nivel de integración. Esto es directamente relevante para la necesidad de reparar las muchas “desconexiones” que habrán resultado de las medidas tomadas durante la pandemia.
El entorno de estos eventos también crea y mantiene las redes productivas que son de importancia para darle contención a las tensiones globales por cierres de fronteras, cierres de transporte, medidas de aislamiento, entre otros que se han producido durante el desarrollo de la pandemia y persistirán más allá del momento en que se eliminan tales restricciones.
4. Diversificación y autosuficiencia:
Dado que la experiencia de COVID-19 interrumpió las cadenas de suministro y aumentó el valor evidente de la autosuficiencia económica, muchas comunidades se han dado cuenta de la fuerza y la resistencia que se puede tener en una economía local más autónoma y diversificada.
Las reuniones de negocios facilitan este proceso al respaldar los tipos de intercambios que conducen a nuevas relaciones, inversiones y actividades comerciales no tradicionales que se pueden utilizar para impulsar la diversificación en la economía local y regional, incluso, desarrollando nuevos eventos que se vinculen estratégicamente con los intereses colectivos para los sectores seleccionados.
5. Transición y renovación:
La evolución de las condiciones sociales y económicas que surgen de la recesión inducida por la pandemia significa que la nueva economía, probablemente, será bastante diferente, incorporando elementos de las economías de la experiencia y del conocimiento que están reemplazando a los modelos más antiguos.
Las reuniones de negocios servirán como agentes de cambio y transformación para asegurar una forma más progresiva de actividad económica y una economía más estable y, por lo tanto, de cara al futuro, al ser claves para la transición económica y social que busca reposicionarse en las “nuevas” economías.
6. Talento e investigación:
Las reuniones de negocios, especialmente las de corte internacional, son imanes para que el talento y los recursos de inversión que impulsan sectores claves de desarrollo y profesionales se encuentren, lo cual es clave para la diversificación económica. Esta puede convertirse en una herramienta estratégica importante que puede ser utilizada para estimular selectivamente las principales prioridades de desarrollo económico y social.
7. Ambientes controlados:
Debido a la naturaleza altamente estructurada de los eventos e instalaciones de negocios, representa una forma mucho más segura de reunión en relación con otras formas de reunión pública. Estas reuniones o eventos de negocios se llevan a cabo en un entorno altamente controlado con estrictas medidas de salud y seguridad e información detallada de sus asistentes ya que, en la mayoría de los casos, los participantes están preinscritos y los organizadores tienen muchas opciones para comunicarse con ellos antes, durante y después de un evento.
Además, generalmente en las políticas de los recintos, existen rigurosos estándares para garantizar su cumplimiento, mucho más allá de los protocolos que nos encontraríamos en un entorno público en general.
8. Legado a las comunidades:
Estos eventos normalmente dejan legados valiosos y relevantes en la comunidad donde se realizan en términos de habilidades y conocimientos transferidos, nuevas redes y mejora de la imagen. Estos legados se pueden canalizar intencionalmente para abordar las necesidades prioritarias de cada comunidad a través de la colaboración y la creación de objetivos compartidos con el organizador para el involucramiento de los asistentes, por ejemplo, jornadas de salud en zonas marginales durante un congreso médico.
9. Utiliza inversiones existentes:
Las reuniones o eventos de negocios utilizan de manera eficiente las inversiones gubernamentales existentes, como instalaciones para eventos, sistemas de transporte e infraestructura, de modo que los incentivos comerciales se pueden generar rápidamente sin la necesidad hacer nuevas inversiones.
Además, gran parte de estos eventos son pagados por el usuario, lo que significa que ofrecen un gran apalancamiento para cualquier inversión. Como resultado, no son tan intensivos en capital como otros sectores que buscan apoyo, pero aún así facilitan los resultados deseados.
10. Son laboratorios de política pública:
Muchos aspectos de la ecuación de reapertura conllevan riesgos importantes, incluida la posibilidad de volver al bloqueo comercial y la necesidad de experimentar con estrategias alternativas de recuperación económica.
En estos aspectos, las reuniones de negocios pueden funcionar como “laboratorios” para probar nuevos enfoques en un entorno seguro y bien contenido antes de que se implementen de manera más general, probando de manera efectiva tanto la dirección hacia una "nueva normalidad" y mitigando el margen de error debido a la ansiedad por probar estrategias comerciales y sociales alternativas.
Dado lo anterior y sumado a muchas otras razones, este 9 de septiembre, Costa Rica inicia la apertura de lo que, bien utilizado por parte de una alianza publico-privada, puede convertirse en un acelerador de la reactivación económica, como lo están haciendo otras grandes economías a nivel mundial.
Créditos: Joint Meetings Industry Council