Veto de Carlos Alvarado a cannabis medicinal cerraría la puerta a mercado mundial de $14 mil millones

Si el presidente Carlos Alvarado veta la ley que permitiría la industria del cáñamo y la cannabis medicinal, le estaría cerrando la puerta a un mercado mundial de $14 mil millones para el 2025, según las proyecciones de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer).

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En momentos en que urge reactivar la economía, generar nuevos puestos de trabajo y también cobrar impuestos, la decisión podría considerarse un contrasentido, según varios diputados defensores del proyecto de ley.

Este lunes, el propio mandatario manifestó que llegado el momento él evaluará si veta o no la ley junto a las autoridades de salud.

“El Gobierno está a la espera de que se dé un segundo debate. A partir de ello, con las autoridades de salud, vamos a revisar el texto final antes de emitir una decisión. Eso es lo que nos corresponderá hacer”, afirmó el mandatario.

La iniciativa autorizaría la producción de las plantas de cannabis -incluidas las que tienen THC – para su uso medicinal y terapéutico, además de permitir su uso industrial. El componente en cuestión es el psicoactivo.

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El proyecto ya fue aprobado en primer debate y la Sala IV no encontró ningún vicio de ilegalidad, por lo que la Asamblea Legislativa podría aprobar esta industria esta semana.

Si los diputados aprueban la iniciativa que permite la explotación comercial del cáñamo industrial y el cannabis medicinal, los productores nacionales podrían acceder a un mercado que en estos momentos ya genera negocios por unos $5 mil millones, lo que permitiría ir cosechando beneficios inmediatos.

El uso y producción medicinal del cannabis y el cáñamo es legal en más de 20 países, con un mercado global antes de la pandemia de 1.000 millones de personas.

En es sentido, Costa Rica puede convertirse en un polo de desarrollo y clúster de empresas.

“Pero es más que eso, estamos hablando de más inversión, empleo, calidad de vida para las personas enfermas y diversificación agrícola. Son miles de empleos”, dijo Zoila Volio, diputada independiente a LA REPÚBLICA antes de la aprobación de la ley.

Mientras tanto, el mandatario se ha opuesto a la aprobación de la ley, al considerar que no se cuenta con los recursos suficientes para velar por la afectación de la salud.

Sin embargo, varios diputados de oposición en el PLN y hasta de su propio partido el PAC, insisten en los beneficios de la iniciativa. De hecho, la bancada oficialista hasta presentó un proyecto para validar la marihuana recreativa, la cual, es apoyada también por su candidato presidencial Welmer Ramos.

“Eso sí debemos garantizar que estos mercados de cannabis medicinal no se concentren, que participen cooperativas, pequeñas empresas, que la riqueza se reparta (…) Por su parte, el cannabis recreativo, es una respuesta contundente a la fallida lucha contra las drogas y vamos hacia adelante con este tema”, dijo Ramos.

El cannabis ayudaría a reactivar la economía, generar empleo, atraer inversión y más importante aún, dar tratamiento alternativo a miles de personas con padecimientos graves.

Artritis, asma, cáncer y dolor crónico son algunos de los padecimientos que se podrían tratar con cannabis medicinal.

En cuanto al cáñamo, se podrían hacer suplementos, alimentos, bebidas, productos de aplicación industrial como bioplásticos y construcción sostenible, además de lácteos, panadería, semillas y snacks.

En estos momentos, más de 350 mil personas no tienen una fuente de empleo, por lo que el impulso a la cannabis y la industria del cáñamo ayudaría a generar empleo.